El marketing digital ha evolucionado aceleradamente en los últimos años, debido, en parte, a la alta competencia de las marcas oferentes y, por otra parte, a la saturación de información promocional en aumento a los potenciales y actuales consumidores de bienes y servicios.
Ya quedó atrás en el marketing digital la limitada estrategia de publicar un sitio web con información estática y esperar pacientemente los resultados mágicos. Las marcas han detectado la necesidad de entregar contenidos a su mercado meta, con el interés de que dicho contenido persuada a las personas hacia la consecución de más ventas.
El marketing tradicional e invasión a los consumidores
El primer camino fue, entonces, utilizar el recurso que se venía usando en el marketing tradicional: la publicidad, ésta como una estrategia comunicacional enfocada en llamar la atención de los usuarios digitales y lograr así una determinada interacción.
La situación actual nos muestra que las personas están siendo menos receptivas a la publicidad en general, dado su acelerado estilo de vida y el poco tiempo destinado en el proceso decisiones de compra. Los consumidores actuales son personas informadas, activas y con la intención de hallar la mejor solución posible para sus problemas o necesidades; evitan las interrupciones y los contenidos invasivos.
Marketing que agrada y acerca a las personas
Es por ello que el marketing digital de hoy en día está tendiendo hacia la entrega de contenidos de valor y a la asimilación de una relación marca-consumidor de reciprocidad constructiva.
El marketing digital, pues, se está desarrollando de acuerdo a los siguientes factores:
- Un conocimiento profundo de nuestros clientes ideales.
- La comprensión del camino que recorren nuestros consumidores para tomar la decisión de compra.
- La gestión de múltiples canales digitales para atraer a los prospectos.
- La planificación, generación y distribución de contenido de valor para nuestros consumidores en los diversos canales digitales de la marca.
- El desarrollo de campañas dirigidas por intereses y preferencias de nuestros prospectos consumidores.
- La medición de los resultados de conversiones y ROI (retorno de la inversión, por sus siglas en inglés) por campaña y gestión digital.
Ver también: 4 principios de una estrategia efectiva de Inbound Marketing